jueves, 17 de julio de 2008

Sobre los servicios y servidores públicos

Es importante resaltar los progresos relacionados a la modernización del Estado alcanzados en los ultimos 16 años. Estos avances van, desde las reformas estructurales en la economia a inicios de los noventa, hasta las politicas post Fujimori para hacer mas transparente la toma de decisiones en la actividad pública. Todo esto con el objetivo de modernizar el país y el Estado. Estas ultimas reformas en materia de transparencia pública se llevaron a cabo principalmente durante el gobierno del Dr. Valentin Paniagua. (Nov.2000 - Jul.2001). Sin embargo, toda regla tiene una excepción (lo cual no debería ser) y algunas instituciones públicas aún creen que estamos en la época del oscurantismo, del abuso arbitrario y el despotismo. Estas instituciones no han entendido el importante rol que adquieren en una sociedad libre y transparente, donde el servicio al ciudadano debe ser su principal objetivo. Tal el es caso particular de la Contraloria General de la República en la ciudad de Ica, donde algunos de sus trabajadores se niegan a identificarse cuando un usuario requiere determinada información. En efecto, en dias recientes realice una consulta teléfonica al trabajador encargado de entregar los certificados de los cursos que organiza la Escuela Nacional de Control (dependiente de Contraloria), quien despues de atender muy altivamente la llamada, cuando le pregunte por su nombre (regla básica de cortesia para poder seguir dialogando) solo atino a colgar inesperadamente el teléfono. Entre el asombro y la indignación por esta actitud, busque en la página web de la Contraloría (1) el nombre de sus trabajadores en la ciudad de Ica y para sorpresa, solo encontre un listado general (supongo que de todo el país) de trabajadores que no permitia distinguir, ni el cargo, ni la dependencia y menos el lugar donde laboraba cada persona. Gran omisión tratándose de una institución que debe garantizar la transparencia y acceso a la información pública. Sin embargo, por lo menos tres lecciones podemos derivar de este portazo teléfonico. La primera es que se debe educar a estos servidores en atención a los usuarios que no somos mas que simples ciudadanos que deseamos alguna guía en la complejidad de tupas, mofs y rofs que abundan en administración pública. La segunda, que todavía hay quienes piensas que trabajar en el sector público es un privilegio ad infinitum y por ello (atornillados en sus escritorios) olvidan que de la calidad de sus servicios depende (también) el desarrollo y la justicia social. Tercero, que este tipo de actitudes no hacen sino incrementar la distancia entre el Estado y las personas que no encuentran en sus instituciones la garantia de un buen servicio y el respeto a sus particulares intereses individuales. Si hechos como estos, que ocurren en una ciudad moderna y dinámica como Ica, no son denunciados, entonces no esperemos que nuestros "servidores públicos" nos respeten y hagan bien su trabajo y sigamos siendo comodos complices de sus consecuencias.
(1) www.contralogia.gob.pe

1 comentario:

Unknown dijo...

Estoy de acuerdo con lo que dices, aparte de eso, creo que también deberia mejorar los servicios que prestan. Y no siempre quejarse que hacen las alli se hacen lentas, solo por el hecho de ser entidad del estado osea !!! "publica"